El Juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador envió a juicio a los pandilleros de la 18, Carlos Antonio Pérez Ramos y Moisés David Vásquez, quienes junto a otros tres miembros de esa estructura expulsaron a una familia de su casa.
Los imputados comenzaron a hostigar a la víctima clave «COVID» en el 2020, cuando la amenazaron en el caserío Los Tanques, del cantón San Isidro, jurisdicción de Panchimalco.
La mujer quien tiene calidad de testigo y víctima, dijo a las autoridades que ante la amenaza de los terroristas, tomó la decisión de irse junto a su familia a otro lugar dejando su vivienda y terreno, pero que no denunció en su momento ya que en el lugar residían sus parientes y tenía temor que los pandilleros atentaran en contra de ellos.
Clave «COVID», manifestó que el 3 de enero de 2021, decidió ir a ver su casa para verificar si no le habían robado las pertenencias o se la habían desmantelado.
A eso de las 4:00 de la tarde cuando caminaba por una quebrada en medio del caserío observó a seis pandilleros, entre ellos Noemi Elizabeth Ortiz Vásquez, alias «Zancuda» a quien conoce muy bien ya que nació y creció en el lugar.
También observó a Rubén Alexander Vásquez, alias «Ratón» y Juan Pablo Vásquez Ramírez; los últimos tres, ya habían sido enviados a vista pública por el mismo caso.
La víctima ha declarado que «Ratón» y Vásquez Ramírez; quienes son hermanos, al verla se pararon frente a ella y no la dejaron pasar, le manifestaron. «Bueno vieja hija de p…, que no te habíamos dicho que no te queríamos ver por aquí», respondiéndoles que solamente iba a ver su terrenito y que no se metía con ellos.
La testigo agregó que al final no la dejaron pasar y la coaccionaron diciéndole que regresara por el lugar donde venía, porque sino la matarían ahí mismo.
Mencionó que Rubén Alexander Vásquez portaba una escopeta y que los demás pandilleros también andaban armados ya que se les asomaba la cacha de las pistolas en las cinturas.
Por temor a que la fueran asesinar se retiró de inmediato del caserío y que en reiteradas ocasiones le manifestaron que no se le ocurriera informar a la Policía, de lo contrario la irían a buscas para asesinarla.
Con esa información aportada, agentes policiales bajo la dirección de la Fiscalía realizaron una serie de diligencias que les permitió identificar a los pandilleros y capturarlos.
