El joven ya había cumplido previamente una pena de 2 años de internamiento por delitos relacionados, sin embargo, a pesar de haber cumplido esa sanción, continuó manteniendo conductas inapropiadas y vínculos con la pandilla.
Durante el mes de junio de 2025, el imputado fue nuevamente detenido tras las investigaciones que confirmaron su participación continuada en actividades delictivas ligadas a dicha estructura criminal.
El Tribunal de Justicia para Menores determinó que el comportamiento reincidente del menor representaba un claro riesgo para la seguridad pública, por lo que dictó una pena de internamiento de 15 años, en conformidad con la legislación aplicable a menores infractores por delitos graves.
Las autoridades reiteran su compromiso con la aplicación de la ley y la protección de la sociedad, especialmente en lo que respecta a la prevención del reclutamiento y participación de menores en estructuras criminales.