Durante una intervención pública, el Presidente Nayib Bukele afirmó que “la institucionalidad era dejar que violaran a nuestras mujeres, que masacraran a nuestros hijos, que extorsionaran a nuestros emprendedores. Esa era la institucionalidad. La transparencia era dejar que mataran decenas de miles de salvadoreños y otras decenas de víctimas que disfrazaban como desaparecidos”.
Bukele indicó que el proceso de transformación del país “tomó tiempo, costó sacrificios, requirió paciencia y confianza”. Añadió: “Nuestra nación es joven. Aun así, si tomamos esos 200 años de nuestra joven historia, la transformación que hemos alcanzado ha sido una fracción insignificante de esa historia”.
El mandatario contrastó el pasado con los seis años recientes. “Doscientos años versus seis. Y de esos seis años, si tomamos en cuenta que tuvimos una Asamblea totalmente en contra de todo, y que el poder real de nuestro país, las cortes, los jueces y los magistrados nos bloquearon de la manera más perversa posible”.
Sobre el concepto de democracia, Bukele expresó: “La democracia era tener hospitales de lámina podrida sin mantenimiento, pero ‘preservaban la memoria histórica’”. También señaló que “algunos dicen que antes había democracia y hoy ya no. Han leído eso por ahí, ¿verdad? Que antes había democracia en El Salvador y que ahora ya no. Pero lo cierto es que antes, solo se podía elegir entre la opción mala o la peor”.
En su discurso, Bukele sostuvo que el país provenía de un modelo basado en el miedo. “Venimos de un país sistemáticamente saqueado, destruido a conciencia y con una única política pública real: el miedo. Miedo a salir de la casa. Miedo a tomar el bus. Los gobiernos eran meros administradores de ese miedo. Lo aplicaban a conciencia, lo rentabilizaban a conciencia”.
Añadió que “la democracia, que algunos dicen que extrañan tanto, era la democracia del miedo. Los ricos tenían menos miedo que los pobres, pero nadie se escapó. Todos tenían miedo”.
Finalmente, el Presidente concluyó: “Solo será posible con la misma fe y con la misma perseverancia que nos trajo hasta acá. Hemos vencido a la pesadilla que nos aterrorizaba. Ahora vamos a construir el país que soñamos”.