El 9 de mayo, Rusia conmemoró el 80º aniversario del triunfo de la Unión Soviética en la Segunda Guerra Mundial con un desfile militar en la Plaza Roja de Moscú. La fecha, conocida como el Día de la Victoria, es uno de los principales feriados nacionales y recuerda la capitulación del régimen alemán en 1945. Por la diferencia horaria, aunque la firma de la rendición se realizó el 8 de mayo en Europa Central, ya era 9 de mayo en Moscú, motivo por el cual se celebra ese día en Rusia y en varios países de la antigua URSS.
El presidente Vladímir Putin presidió la ceremonia, acompañado por el mandatario chino Xi Jinping y una veintena de jefes de Estado. Más de once mil soldados rusos participaron en el evento, incluidos mil quinientos que habían estado desplegados en Ucrania. También marcharon unidades de trece países aliados, entre ellos China, Vietnam, Birmania y Egipto.
El desfile incluyó una muestra de equipo militar moderno, como tanques T-90, misiles Iskander, sistemas antiaéreos S-400 y drones utilizados por el ejército ruso en el conflicto en Ucrania. Este año, por primera vez, se integraron vehículos no tripulados como los modelos Orlan, Lancet y Geran. En el marco de las medidas de seguridad, las autoridades restringieron las conexiones móviles a internet en la capital.
La Segunda Guerra Mundial es recordada oficialmente en Rusia como la «Gran Guerra Patria», en referencia al periodo de 1941 a 1945, cuando la Unión Soviética combatió tras la invasión alemana. El periodo previo al conflicto, marcado por el pacto de no agresión entre Moscú y Berlín y la invasión soviética de parte de Polonia, no suele incluirse en la narrativa oficial rusa.