El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este martes, la prohibición de importaciones de petróleo y gas rusos, con el objetivo de asestar un fuerte golpe a las fuentes económicas del Presidente Vladímir Putin.
El mandatario reconoció que tras las medidas anunciadas los precios del petróleo se incrementarán en el país norteamericano.
“Hoy anuncio que Estado Unidos está apuntando a la arteria principal de la economía de Rusia”, ha afirmado, detallando que “el petróleo ruso ya no será aceptado en puertos de EE.UU.
El mandatario ha declarado que Washington entiende que algunos de sus aliados en Europa no pueden unirse a la prohibición de importar energía de Rusia. “Estamos trabajando estrechamente con Europa y nuestros socios para desarrollar una estrategia a largo plazo para reducir también su dependencia de la energía rusa”, precisó.
En cuanto a la situación en Ucrania, el presidente de EE.UU. ha dicho que Washington y sus aliados continúan suministrando armas al país y aumentando la ayuda humanitaria.