Cómo parte de la guerra contra las pandillas, los privados de libertad en fase de confianza continúan con el borrado de grafitis alusivos a las estructuras terroristas a nivel nacional.
Esta vez, los internos se han trasladado a El Proyecto Santa Teresa, del municipio de San Martín, para continuar con estas acciones que devolverán la tranquilidad a las familias salvadoreñas.
“No nos vamos a detener hasta borrar cada mancha que hicieron los criminales”, advirtió el Director General de Centros Penales, Osiris Luna Meza.
De acuerdo a Luna Meza, ahora los pandilleros ya no podrán hacer sus “distintivos” en ningún lugar, ya que podrían pagar hasta con 15 años de cárcel por ese nuevo delito.
“Muchas familias veían imposible borrar los grafitis que terroristas habían hecho en sus casas”, manifestó el funcionario, quien al mismo tiempo afirmó que el Gobierno del Presidente Nayib Bukele los eliminará todos.
Osiris Luna ha sido contundente en asegurar que eliminarán todos los grafitis de las comunidades que fueron sometidas por las estructuras terroristas.