A las 09H00 locales, hora habitual de apertura del museo, los primeros visitantes empezaron a entrar en la pinacoteca.
La galería de Apolo, de donde fueron sustraídas las joyas, permanece cerrada, indicó el museo a AFP.
La policía sigue buscando al grupo de cuatro malhechores que perpetró el atraco el domingo por la mañana en esta galería, situada en un lateral del museo, el más visitado del mundo.
Los ladrones estacionaron un montacargas bajo uno de los balcones, dos de ellos subieron a él y con una sierra radial entraron en la sala a través de una ventana.
Con los rostros cubiertos, robaron nueve joyas, entre ellas una diadema de perlas de la emperatriz Eugenia y un conjunto de collar y pendientes de zafiros de la reina María Amelia. En su huida, una de las piezas, una corona, fue abandonada.
Este espectacular atraco, de apenas ocho minutos, dio la vuelta al mundo y reavivó las críticas sobre la falta de seguridad en las pinacotecas de Francia.